• 3 de abril de 2024 11:19 AM

Vuelve la música pusilánime

Por Mauricio Rodríguez

El próximo martes 12 de abril se vuelve a reunir Los Pusilánimes, la legendaria banda que nació en las largas giras que hizo en los 80 y 90 Jaime Roos. Presenta su disco “Criaturas musicales” en el Teatro Solís, a las 20:30 horas.

La banda está conformada por Hugo Fattoruso, Diego Ebbeler, Carlos Quintana, Popo Romano, Gustavo “Cheche” Etchenique y Walter “Nego” Haedo. Se reúne para celebrar los 24 años de su disco «Criaturas Musicales», que fue grabado en la década de los 90 en Circo Beat, el estudio de Fito Páez, y que fue producido por el estadounidense Neil Weiss. Un trabajo de referencia que acaba de ser reeditado.

En los avances de la presentación del disco, se dijo: «Hay rock, hay jazz y hay World Music. Aquí todo se suma a esto, Los Pusilánimes, una fusión de otro tipo. Criaturas musicales, provenientes de otro lugar y tiempo, aunque muy adelantadas a su tiempo. Bienvenidos a lo desconocido».

¿Cómo surge la idea de este reencuentro tantos años después?

Se reedita el año pasado una grabación que hicimos hace un buen tiempo en el estudio Circo Beat, el estudio de Fito Páez. Hay un trabajo de remasterización. Con esa excusa, les escribí a todos para ver cuándo podría ser que se encontraran todos en Montevideo, pare ver de juntarnos. La fecha que surgió como posibilidad fue abril, entonces hicimos algunas consultas a salas para poder hacer algo. Y el Teatro Solís nos dio la posibilidad del 12 de abril, y así surgió.

¿Cómo surgió el “proyecto Pusilánime”?

En aquellos tiempos éramos todos instrumentistas que acompañábamos a Jaime (Roos). O sea que el que nos une, de alguna manera, es Jaime. Había como una “convivencia” casi permanente, había muchos toques, giras largas. Entonces en los ensayos, en algún tiempo libre, empezaron a nacer canciones. Hugo Fattorusso tiraba alguna música, Carlos Quintana otra, yo alguna cosa. Entonces se dio, se fue dando, la idea de madurar este proyecto. Un proyecto que en aquel momento estaba muy aceitado. En cada hueco que había, hacíamos música.

¿Por dónde se plantearon llevar la música en ese momento?

Era todo muy espontáneo. Del momento, el entusiasmo que había. Todo lo que significaba para nosotros acompañar a Jaime en esas giras, esos estadios llenos de gente. Y estar con Hugo y toda esta barra. Eso genera en el músico una cuestión de adrenalina. Una emoción, como una excitación.

¿Cómo fue este reencuentro con el resto de los músicos de la banda?

Hicimos mucho trabajo previo a distancia. Hay una sensación de emoción, de cuidado, de “entrar en sintonía”. De “entrar en calor” con lo que estamos haciendo. Hay como una mezcla extraña de respeto, de cuidado. Y de “ponernos las pilas”, porque no podemos olvidar que esto fue grabado hace mucho tiempo en estas circunstancias que te decía. La cabeza y el estado emocional está intentando entrar en sintonía con 25 años atrás. No es sencillo (Risas).

¿Qué van a mostrar el martes en el Solís?

Vamos a recrear fundamentalmente ese disco que grabamos, que se llama “Criaturas musicales”. Y también canciones nuevas. Hay músicas de Hugo, hay también alguna mía. Y aunque suene empalagoso, hay mucho amor y mucha admiración entre cada uno de los que formamos parte de esto.