• 4 de abril de 2024 9:28 AM

Joaquín Lapetina habla de su nuevo disco

«Octubre al Sur» está disponible en plataformas digitales

En octubre de 2020 el cantautor uruguayo Joaquín Lapetina editó bajo el sello Perro Andaluz su tercer disco solista, Octubre al Sur. Un trabajo que cierra una trilogía abierta con sus discos anteriores, Tiempo Lento (2014) y El Puro Oficio del Sol (2016), también editados por Perro Andaluz.

Destacado por la crítica como «una de las personalidades musicales más interesantes y valiosas del mapa actual de la canción popular por la independencia con que va forjando su lenguaje y por un planteo estético sólido”, Lapetina nos presenta ahora un trabajo que surge puertas adentro y tras un proceso de gran cercanía y exploración junto a los músicos que lo han acompañado en los últimos años.

Sobre el proceso de creación del disco, el artista dijo que fue largo y muy enriquecedor: «Me tomé un tiempo para componer y elegir canciones. Luego, junto a Fernando Flores y Ana Laura Pena, hicimos versiones acústicas a dos guitarras y voces. Las maquetas fueron creciendo en una producción artística liderada por Fernando, a la que luego se sumaron más amigos músicos en un proceso en el que todos colaboraron. Las bases se grabaron tocando juntos en Mastodonte (Gastón Ackermann) y luego realizamos un proceso de sobregrabaciones en Rico´s Studio (Fernando Flores), en paralelo al avance en los arreglos. El concepto del disco también se fue desarrollando en forma progresiva”.

El disco, compuesto por 10 canciones, se desarrolla en cuatro actos: “Apertura”, “Navegando por octubre”, “Entrando en sueño” y “En sueño”

¿En qué momento de tu camino artístico sentís que estás hoy?

Siento que estoy en un camino de ida viviendo nuevas experiencias, disfrutando y aprendiendo a través de la música. Publicar este tercer disco me ayudó a madurar otro poco y me permite mostrar mejor mi propuesta. Hacia adelante estoy con ganas de seguir explorando desafíos que me motiven y hagan bien.

¿Cómo fue el proceso de grabar este nuevo trabajo?

Fue un proceso largo y muy enriquecedor. Me tomé un tiempo para componer y elegir canciones. Luego, junto a Fernando Flores y Ana Laura Pena hicimos versiones acústicas a dos guitarras y voces. Las maquetas fueron creciendo en una producción artística liderada por Fernando, a la que luego se sumaron más amigos músicos en un proceso en el que todos colaboraron. Las bases se grabaron tocando juntos en Mastodonte (Gastón Ackermann) y luego realizamos un proceso de sobregrabaciones en Rico´s studio (Fernando Flores), en paralelo al avance en los arreglos. El concepto del disco también se fue desarrollando en forma progresiva.

¿Qué diferencias tiene respecto a tus discos anteriores?

Para este disco logramos dar un paso más en la calidad de las grabaciones y el sonido alcanzado. Nuevamente apuntamos a una instrumentación de banda, pero esta vez grabando gran parte del disco juntos y eso colaboró para un sonido más orgánico. Las canciones quedaron más emparentadas entre sí que en los discos anteriores, tanto por la base de músicas y letras como por la instrumentación y arreglos.

¿Por qué el nombre «Octubre al sur»?

En este caso una de las canciones pasó a darle el nombre al disco. Octubre al sur es nuestra primavera y la vida se expresa con fuerza luego del invierno. El mes parece fugaz por fuera, mientras por dentro ocurren procesos personales y uno se deja llevar por ellos.

¿Por dónde van las letras del disco? ¿Qué temas son los que te interesan plasmar en tus canciones?

Las letras de este disco creo que van por un camino más espiritual e interior. No fue planificado, se fue dando de esa manera como si se hubieran juntado las canciones entre sí. Se mezclan los tiempos, el espacio interior y exterior quedan como indefinidos.

¿Cómo has logrado que convivan en vos la música y la agronomía?

Como actividades se enriquecen mutuamente y eso me hace muy bien. Ambas actividades las realizo con el mismo cariño y compromiso. El mayor desafío ha sido dar pasos seguros en la música, ocupando no más allá de los “ratos libres” de la agenda semanal.

¿Como artista qué evaluación haces de esta emergencia sanitaria?

Es un momento muy difícil para el trabajo de los artistas hacia el público. En mi caso, con una dedicación en gran parte a distancia pudimos completar lo que habíamos iniciado el año pasado, así que nos pudimos adaptar. En general es un momento triste para los artistas y para toda la sociedad, pero tendremos que reflexionar, aprender y ayudarnos para seguir adelante.

¿Cómo crees que va a impactar en la cultura y cómo imaginás los nuevos escenarios culturales?

Estamos viviendo cambios muy grandes en nuestro entorno, que desafían tanto al artista como al público. El arte es comunicación y tiene una razón de ser social; confío en que de una forma u otra ese diálogo se logrará establecer. Las artes siempre tendrán un lugar relevante como expresión de la gente en su tiempo.