“El debate sobre Fructuoso Rivera va a seguir por muchísimo tiempo”
El escritor e historiador Jorge Chagas acaba de publicar “El pardejón. La novela de Fructuoso Rivera”. Allí narra el traslado del cadáver de Rivera desde Cerro Largo a Montevideo en un barril de caña. Y Eustaquio Santos, el fiel soldado del caudillo que encabeza la fúnebre comitiva, recuerda en un contrapunto con la voz de ultratumba del propio Rivera su azarosa vida.
Jorge Chagas, con su reconocida audacia narrativa, se anima a meterse en la piel del caudillo y lo hace decir de su ignominiosa celada a los charrúas: “¡Sí!, yo, don Frutos, estaba matando amigos, como antes lo hacía con los perros viejos, sin lágrimas ni risas. Aquel día en Salsipuedes, vestido con mis mejores galas de presidente de la República, ejecuté con los charrúas un verdadero acto de amor”.
Chagas es magíster en Historia Política, escritor, historiador, compositor y periodista. Trabajó en los medios Aquí, Alternativa, El Observador y Tres. Es miembro desde 1997 del taller de literatura Rubén D’Alba, que coordina Lauro Marauda. Participó en el 2002 junto a Eduardo Galeano, Mario Benedetti, Mario Delgado Aparaín, Hugo Burel y otros escritores de renombre en la obra colectiva “El cuento uruguayo”. En 2003 ganó el Primer Premio de Literatura del MEC y una mención de honor en el Premio Municipal de Literatura con la obra “Gloria y tormento. La novela de José Leandro Andrade”. En 2008 la comparsa Yambo Kenia musicalizó el texto y ganó el Primer Premio de Carnaval en su categoría. En 2009 ganó el Primer Premio Nacional de Literatura (ensayo histórico, inédito) con “Banco La Caja Obrera. Una historia”, y en 2010 el mismo premio con “Guillermo Chifflet: el combate de la pluma”, ambas obras en coautoría con Gustavo Trullen. En 2013 obtuvo el Segundo Premio de Literatura del MEC con “La sombra. La novela de Ansina” y en 2015 el mismo premio con “El sable roto. La novela del coronel Lorenzo Latorre” (Fin de Siglo, 2016). En 2016 ganó el Premio Morosoli de Plata en Narrativa. En 2019 se estrenó la adaptación a teatro musical de “La diosa y la noche. La novela de Rosa Luna” (Fin de Siglo, 2017), protagonizada por Lola Acosta y dirigida por Jorge Heller. Es socio de la entidad social y cultural Africanía desde el año 1997.
¿Qué debe tener un hecho histórico para que te resulte atractivo de contar en forma de novela?
A mi juicio uno de los atractivos mayores que puede tener un hecho histórico cualquiera es si en el presente existe una fuerte polémica sobre el mismo. Es decir, que aún con el paso del tiempo promueva discusiones, polémicas, diferentes interpretaciones. Ese es un material muy rico para la ficción, porque estamos ante los claroscuros de la condición humana. Y somos, precisamente, los seres humanos los que hacemos la historia.
¿Qué tuvo de atrapante el incidente del traslado de los restos de Rivera?
Lo más atrapante es el traslado del cadáver de Rivera en un barril de caña desde Cerro Largo hasta Montevideo. Fueron varios días y esto posibilita ficcionar sobre lo sucedido en ese lapso. Mi novela apela a un elemento fantástico: Rivera habla desde el «más allá.» Es su voz de ultratumba. Y, por supuesto, da su versión sobre todo lo acontecido.
¿El objetivo que te planteaste fue “hacer hablar” a Rivera y “escuchar” su versión de algunos acontecimientos?
Si, es así. La versión de Rivera puede incomodar al lector. Porque no hay ningún arrepentimiento con respecto a sus acciones más controversiales. Él justifica esos actos, incluso con vehemencia.
¿Cómo reconstruís sus posibles reflexiones?
La reconstrucción se basa en un estudio de la personalidad de Rivera. Por ejemplo, las cartas que escribió son un material muy valioso. Y el contexto histórico en el que se mueve.
¿Qué es lo más desafiante de reconstruir, en forma novelada, cualquier hecho histórico, como hiciste en este y en otros trabajos de tu autoría?
Las mentalidades de época. Los hombres y mujeres de los siglos XVIII y XIX no solo se manejaban con otro tipo de lenguaje y usaban otras vestimentas. Es más complejo. Sus formas de ver la realidad que los rodea es muy diferente. Esto incluye las relaciones familiares, los hábitos, costumbres y rutinas, los conceptos de amor y sexo, los valores, los saberes, las supersticiones, el relacionamiento entre las razas, los miedos… Todo eso debe ser tenido en cuenta a la hora de escribir una novela histórica.
¿Cuáles fueron los mayores desafíos de esta novela en particular?
Explicar porque Rivera se pasó al bando portugués abandonando a Artigas y ¡por cierto! la matanza de los charrúas Salsipuedes.
¿Fructuoso Rivera ocupa el lugar que merece en nuestra Historia?
Buena pregunta. Rivera es muy discutido. Nunca hay que olvidar que es considerado por el Partido Colorado como su fundador. Existe una corriente historiográfica que lo acusa de traidor a Artigas y genocida. Siempre he sostenido que, con estas acusaciones, en el fondo, no están cuestionando su figura, sino que buscan mellar a uno de los símbolos más importantes del Partido Colorado. En otras palabras: atacan al Partido Colorado. El problema es que estos juicios se realizan desde este presente, en base a valores y conocimientos que eran inexistentes en el tiempo de Rivera. Creo que el debate va a seguir por muchísimo tiempo. Y eso hace más que interesante a su figura.